Así que se escogió una fotografía de su castillo favorito, el de La Bella Durmiente de Disneyland París, y se plasmo en un DM de 1,70 mt de alto con la silueta recortada para encajar en el dormitorio y la anchura de la cama y se pintó como si fuese "un cuento".
El castillo que centra toda la atención de Disneyland París es rosa muy clarito, con las tejas azules y oro, con los arboles podados cuadrados como los de los Campos Elíseos. Así que el castillo de Sara fue rosa, con los tejados azul y los remates en oro.
Todo pintado a mano, con varias capas opacas y transparentes para dar textura y profundidad a la imagen; es como si estuviésemos allí, en la plaza central, contemplando el castillo con un filtro que lo convierte en un castillo "de cuento"
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